MADRID

El lehendakari y Secretario General de los Socialistas Vascos, Patxi López, ha negado hoy la supuesta debilidad del Gobierno y del PSOE y ha contrastado su fortaleza frente a la oposición "destructiva" del PP como estrategia ante sus problemas de corrupción.

López, en su intervención ante el Comité Federal del PSOE que se celebra en Madrid, ha espoleado a sus compañeros socialistas porque todos tienen la "obligación" de dar la vuelta a esa imagen de supuesta debilidad "para que se ajuste a la realidad".

"Tenemos un Gobierno que gobierna, un partido que vertebra este país y un presidente que gobierna", ha subrayado en su intervención a puerta cerrada, según han informado fuentes socialistas.

En este contexto, ha negado que los socialistas vayan a cerrar filas porque ha habido una consigna de la dirección en este sentido.

"Nos conocen poco" quienes digan eso, ha continuado, porque si hay cierre de filas es porque hay un proyecto, "hay políticas y porque hay convencimiento, determinación y orgullo". "Soy un socialista vasco y creo en esto", ha argumentado.

Así las cosas, ha instado a sus compañeros a "dar y ganar la batalla de la imagen instalada" y a "no encerrarse en su parcela particular para protegerse de la tormenta". "Ahora es momento de mojarse, es momento de ser valientes para decir lo que hacemos y por qué lo hacemos", ha apostillado.

Sobre el aumento de la presión fiscal, ha considerado que el PSOE ha tomado "la decisión difícil, pero es la que tocaba", de ponerse del lado de los que más necesitan de las actuaciones del Ejecutivo y de sostener y mantener las políticas sociales.

Ha denunciado, en este punto, la "hipocresía" de fondo del debate público sobre impuestos de las últimas semanas, porque "a la mayoría de los que la critican -ha juzgado- les importa un bledo que este país no tenga recursos para atender a quienes no tienen recursos, les importa un bledo que las empresas puedan despedir sin cortapisas".

Frente al proyecto socialista ha opuesto un PP que "esconde sus ideas, sin sentido de Estado e incapaz de demostrar que es un partido de Gobierno", porque practica "una oposición destructiva como estrategia ante sus problemas de corrupción".

Igualmente, se ha referido a la situación en el País Vasco y ha indicado que el PSE está dispuesto a buscar acuerdos con el PNV a fin de lograr el apoyo presupuestario en el Parlamento.

"Es nuestra responsabilidad, pero sin olvidar quiénes son y lo que buscan, porque lo primero que buscan es cargarse el Gobierno de cambio en Euskadi", ha señalado.

Después de "años en el monte", ha advertido, los nacionalistas vascos quieren aparecer como "moderados" y como "una fuerza política imprescindible.