El PSE-EE dice "que los cambios en política penitenciaria serán fruto del proceso de paz"
Advierte que, con la paz y libertad "asentadas", el sistema democrático "sabrá perdonar y ser generoso con quienes se arrepientan"
VITORIA
El portavoz de la Ejecutiva del PSE-EE, Rodolfo Ares, aseguró hoy que "los cambios que se puedan introducir en la política penitenciaria en el futuro se harán fruto del diálogo en el proceso de paz y cuando se compruebe que son útiles para acabar definitivamente con el terrorismo". Además, aseguró que, con la paz y libertad "asentadas definitivamente", el sistema democrático "sabrá perdonar y ser generoso con quienes se arrepientan y quieran reinsertarse en la sociedad democrática".
El dirigente socialista efectuó estas declaraciones en la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento Vasco, en el transcurso del debate de una iniciativa de EHAK en defensa de los derechos del preso de ETA Iñaki De Juana. La propuesta, así como la enmienda a la totalidad de los grupos del tripartito en la que se pedía una "flexibilización" de la política penitenciaria, no salieron adelante debido a la oposición de PP y PSE.
En su intervención, Ares manifestó que las modificaciones que puedan introducirse en la gestión de los presos "no están vinculadas a cuestiones como la legalización de la izquierda abertzale".
Por el contrario, explicó que "para los socialistas, la política penitenciaria está vinculada a la política antiterrorista", de modo que "lo que se tenga que hacer en relación con esa política tendrá que ser fruto del acuerdo y de un diálogo sosegado para que contribuya a conseguir la paz y la libertad".
"Los cambios que se puedan introducir en la política penitenciaria en el futuro se harán dentro de los márgenes de la ley, fruto del diálogo en el proceso de paz y cuando se compruebe que son útiles para acabar definitivamente con el terrorismo y conseguir la paz", añadió.
En la misma línea, proclamó que las decisiones que deban adoptarse en torno a este asunto "serán de carácter individual, con aplicación estricta, con respeto de los márgenes que tenga la ley y teniendo en cuenta la actitud y comportamiento de cada preso".
Tras asegurar que los reclusos de la banda terrorista "no están en el tablero de ajedrez de la política del Gobierno", aseguró que el Ejecutivo central "está haciendo una política seria y responsable". Esta política, insistió, "se mofificará cuando, fruto del diálogo del proceso de paz, se constate feacientemente que puede contribuir a acabar definitivamente con el terrorismo".
"SIN CHANTAJE"
El dirigente socialista advirtió de que los cambios que puedan llevarse a cabo en este campo "no serán en absoluto fruto del chantaje, de presiones, manifestaciones ante sedes de socialistas ni menos de actos vandálicos y terroristas como los cometidos recientemente en el Ayuntamiento de Pasaia".
"Con la paz y libertad asentadas definitivamente, el sistema democrático sabrá perdonar y ser generoso con quienes se arrepientan y quieran reinsertarse en la sociedad democrática", añadió, antes de avisar de que "ni los presos, ni ETA ni nadie puede tutelar las decisiones libres de la Justicia, ni desde luego va a influir en las decisiones que tengamos que adoptar los socialistas".
Desde el PNV, Nerea Antia mostró su "alegría" por el abandono de la huelga de hambre por parte de De Juana y aseguró sentir "mucho" que la cuestión de la política penitenciaria, "que tenía que estar resuelta desde hace mucho", aún deba estar siendo objeto de debate.
El parlamentario de Eusko Alkartasuna Rafa Larreina reiteró la postura de su partido en torno a esta cuestión y afirmó que la política penitenciaria debe regirse por el respeto a la "dignidad" de la persona, por el objetivo de la reinserción en lugar de la "venganza". Además, consideró que este tema "nunca debe estar sometido a criterios de oprtunidad o cuyuntura política".
El portavoz de EB, Oskar Matute, consideró una "buena noticia" la decisión de De Juana de acabar con su protesta y reclamó una política de prisiones "más justa", el acercamiento de los presos vascos y la transferencia de la competencia sobre esta materia.
El portavoz popular en materia de Interior, Carlos Urquijo, aseguró sentir "indiferencia" ante la decisión del preso de ETA, del que recordó que es "el asesino convicto y confeso de 25 personas". Además, acusó a EHAK de "mentir" al hablar de "presos políticos", ya que los reclusos de la banda son terroristas condenados "por asesinatos y secuestros".
La parlamentaria de EHAK Itziar Basterrika defendió su propuesta y consideró que a pesar de haber abandonado la huelga de hamber, De Juana sigue viendo como sus derechos "siguen siendo conculcados".
La parlamentaria de Aralar, Aintzane Ezenarro, mostró su "alegría" por el fin del ayuno protagonizado por el preso de ETA y advirtió de que la política penitenciaria "no debe usarse como moneda de cambio".
La propuesta de EHAK, en la que se reclama la excarcelación de De Juana y el acercamiento de presos, fue derrotada por los votos en contra de PP y PSE al contar sólo con el apoyo de Aralar y al haberse abstenido PNV y EA (EB no tiene voto en la comisión). La enmienda del tripartito también fue rechazada, también por el rechazo de PP y PSE y la abstención de EHAK y Aralar.