"ETA y la izquierda abertzale son los únicos responsables de que el proceso pueda avanzar"
"La pelota está en el tejado de la izquierda abertzale y ETA, a quienes exige mover ficha para avanzar en un camino hacia la paz en el que sigue confiando".
VITORIA
Jueves, 16.30 horas. Los pasillos del Parlamento Vasco están vacíos, pero en el despacho socialista se devoran folios para ultimar los flecos que separan el acuerdo presupuestario con el Gobierno Vasco. El portavoz de la Ejecutiva del PSE, Rodolfo Ares, se despide de su compañero de grupo y batallas políticas José Antonio Pastor segundos antes de iniciar un repaso a la actualidad del proceso y todo lo que acontece a su alrededor, bloqueo incluido. Desde el primer momento deja claro que la pelota está en el tejado de la izquierda abertzale y ETA, a quienes exige mover ficha para avanzar en un camino hacia la paz en el que sigue confiando.
Zapatero ha anunciado "pasos firmes" en el proceso frente a los malos augurios de la izquierda abertzale. ¿Qué medidas contempla esta declaración de intenciones?
Hay una voluntad clara por parte del Gobierno y de su presidente de recorrer el camino para acabar con la violencia a través del diálogo, tanto del Ejecutivo con ETA como el diálogo político entre las formaciones vascas que permita asentar la convivencia y que todo el mundo pueda defender sus posiciones desde el respeto a las reglas de juego. Para que se pueda avanzar tiene que darse una voluntad inequívoca por parte de ETA de querer retomar el camino de dejar la actividad terrorista, ausencia total de violencia y una posición que no dé lugar a equivocaciones de la izquierda abertzale de querer hacer política para defender desde ahí sus reivindicaciones. Lo que es una equivocación desde el punto de vista democrático y ético es que alguien piense que para que la izquierda abertzale pueda hacer política haya que rebajar las exigencias del Estado de Derecho. Eso sería inaceptable. Que haga política desde las reglas de juego incluso para plantear su modificación en el futuro. Sería un error buscar atajos sin alejarse de la violencia, porque mostraría una vuelta atrás.
¿El diálogo entre el Ejecutivo y ETA se ha estancado en un inamovible cambio de acercamiento de presos por cese de la violencia?
Es el Gobierno el que lleva las relaciones del posible diálogo con ETA, cuando se pueda producir, y el que tomará las decisiones en materia penitenciaria. Pero es evidente que la política penitenciaria que pueda hacer el Gobierno se tiene que hacer, a mi juicio, siempre que se tenga la convicción de que es útil para el proceso de paz, en el marco de un diálogo político y siempre que el proceso avance.
Por cierto, ¿cómo vivió la reprimenda de José Blanco a su portavoz parlamentario, José Antonio Pastor, por hablar sobre los encuentros con la organización terrorista?
Es una cuestión absolutamente zanjada sobre la que no creo que merezca la pena seguir hablando.
No obstante, ¿demuestra las diferentes visiones de los socialistas sobre la 'discreta' estrategia del Gobierno?
Demuestra que tanto la comunicación con el Gobierno como con el PSOE es muy fluida y no tengo nada más que añadir a lo que se ha dicho hasta ahora.
Esa comunicación fluida parece no repetirse con los demás partidos, al menos así se desprende de las críticas por la falta de información sobre el proceso.
El ministro del Interior dijo con toda claridad, al igual que el presidente del Gobierno, que cuando hubiera alguna novedad acudiría al Congreso de los Diputados a informar a los diversos grupos parlamentarios. Lo que está pasando es que estamos en un momento en el que no hay novedades o, dicho de otra forma, hay situaciones negativas en relación con el proceso. Cuando ETA entienda que estamos ante un momento histórico que es necesario aprovechar, estaremos en el buen camino. Espero que los que hoy se denominan dirigentes de la izquierda abertzale tengan la valentía política, la altura de miras y la responsabilidad de llevar su mundo a la política, alejado de la violencia. Por eso, cuando se habla de que la izquierda abertzale se convierta en una fuerza legal para defender sus reivindicaciones a través de la política no hablamos de un favor que nos hacen a los demás, sino, en todo caso, de una oportunidad que la democracia le da a la izquierda abertzale para defender sus posiciones.
El PSOE dice que "sólo unos pocos saben lo que pasa", pero las valoraciones llegan desde muchos frentes. Los sindicatos policiales piden a socialistas y 'populares' que acaben con el espectáculo "bochornoso" que protagonizan con sus discrepancias sobre el proceso.
Los enfrentamientos se están dando porque el PP está manteniendo una postura irresponsable de confrontación y ataque al Gobierno con la política antiterrorista y con la política que tiene que llevarnos a acabar con la violencia. Han sobrepasado todas las líneas rojas de la licencia política y mantienen una actitud que no es de recibo, porque si algo hay que exigir al principal partido de la oposición es que apoye al Gobierno en ese camino para intentar acabar definitivamente con la violencia. Por cierto, como hicimos los socialistas cuando estábamos en la oposición. En fin, cada uno está donde quiere estar. Nosotros todo lo que estamos haciendo es intentar que no haya más víctimas.
¿Qué es más difícil, lograr el apoyo del PP o que Batasuna vuelva al arco parlamentario?
Espero que el PP rectifique a medio plazo, se dé cuenta de su terrible equivocación y pida disculpas. En lo que hace referencia a la izquierda abertzale, deseamos que tomen una decisión que les permita llegar a tomar decisiones a través de una organización legal y que se separen del amparo de justificación de la violencia. Ésa sería la mejor prueba para demostrar que la declaración de Anoeta era una posición decidida y clara para acabar con esa situación. Ojalá los actuales dirigentes tengan la suficiente valentía para hacerlo.
¿ETA tiene que mover ficha para que lo haga Batasuna?
ETA tiene que dejar de tutelar la política y dejar que la izquierda abertzale se convierta en una fuerza legal. La responsabilidad de que el proceso pueda avanzar es única y esclusivamente de la izquierda abertzale y ETA.
La celebración de una manifestación en favor del proceso de paz ha dividido el discurso del tripartito. ¿Qué efectos tendría esta iniciativa en el proceso?
Compartimos la prudencia y la responsabilidad del presidente del PNV, Josu Jon Imaz, y estamos convencidos de que, sin descartar que se pueda llamar a la ciudadanía a una futura manifestación, ésta tiene que hacerse en el momento oportuno, siempre desde la unidad de los demócratas y cuando tengamos la garantía de que es útil para empujar el proceso y no para generar más confrontación. Lo que ahora corresponde es que las instituciones, los gobiernos y los partidos políticos hagamos nuestro trabajo.
¿El Gobierno afrontaría un frente nacionalista como el que planteaba ERC como un nuevo obstáculo?
El camino de acumulación de fuerzas nacionalistas ya se ha ensayado en el pasado. Fue lo que se intentó hacer en Lizarra y todos sabemos como acabó. Hay que aprender de los errores y estoy seguro que algunos de los que estuvieron en ese pacto saben perfectamente que ese camino no conduce a ningún sitio.