BILBAO

El secretario general del PSE-EE de Bizkaia y portavoz del partido, José Antonio Pastor, advirtió hoy de que los socialistas cesarán al gerente del Consorcio de Transportes de Bizkaia (CTB), Juan Cruz Nieves, en el caso de que no lo haga el diputado general de Bizkaia y presidente del CTB, José Luis Bilbao, si no presenta el informe exigido para aclarar su gestión o si éste no es "satisfactorio".

Pastor compareció hoy en rueda de prensa, junto al secretario de Organización, Iñaki Egaña, y la secretaria Institucional, Begoña Gil, para analizar la situación en el Consorcio de Transportes de Bizkaia, en relación al soterramiento del metro en Urduliz y a la aparición de 56 millones de euros en concepto de remanente de caja que no se reflejaron en el primer presupuesto para 2010, así como a la acusación al Gobierno vasco por parte de responsables forales de "usar su mayoría para eliminar proyectos ya comprometidos con Bizkaia".

Según reiteró, si Juan Cruz Nieves no justifica de forma satisfactoria sus actuaciones, en relación a la aparición en la contabilidad de la entidad de 56 millones de euros en concepto de remanente de caja, pedirán su cese al diputado general de Bizkaia, "que, en teoría, lo tendría que firmar como presidente del CTB". En caso de no hacerlo, el PSE-EE utilizaría su mayoría en este organismo para forzar el cese.

Pastor remarcó que el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, sigue teniendo la presidencia del CTB "a pesar de la minoría de representantes" del PNV en este órgano, a la vez que advirtió que esa presidencia "no le capacita para fijar unilateralmente el orden del día de las reuniones, porque no tiene las mayorías y es contrario a lo expresamente pactado".

Pastor denunció que, en los últimos días, la Diputación Foral de Bizkaia "se ha embarcado en una estrategia deliberada de desinformación, que no tiene otro objetivo que erosionar la credibilidad del Consorcio de Transportes de Bizkaia y del Gobierno vasco".

Tras asegurar que "se puede entender, porque es humano, que un cargo público trate de arrimar el ascua a su sardina", el dirigente socialista advirtió que "lo que no se puede admitir es la mentira, la descalificación, la calumnia y la desestabilización como forma de actuación".

Pastor afirmó que el diputado general de Bizkaia está "mintiendo deliberadamente a la sociedad vizcaína" e "intentando crear alarma social, falseando o tergiversando determinados datos con el objetivo claro de desestabilizar al Gobierno de todos los vascos".

En ese sentido, dijo que Bilbao "cuenta las cosas no como son en realidad, sino como conviene a sus intereses personales". "El mismo señor que amenazó con no aportar más dinero al Gobierno vasco para la financiación del metro en el comienzo del mandato del lehendakari, Patxi López, es el que nos está acusando ahora de haber paralizado determinadas obras del metro, con el único objetivo, según ellos, de castigar Bizkaia", censuró, para añadir que, "a eso, en lenguaje popular, se le llama tener morro".

Pastor aseguró que, la realidad, "por suerte para los vizcaínos, es muy otra" y criticó que los representantes de la Diputación Foral de Bizkaia en el CTB se han comportado "con deslealtad manifiesta, quebrantando todos los acuerdos a los que se había llegado con la representación del Gobierno vasco".

Al contrario, destacó que "todos y cada uno de los compromisos adquiridos en la reunión mantenida" entre el consejero de Transportes, Iñaki Arriola, y José Luis Bilbao "están incorporados en el actual presupuesto del Consorcio de Transportes". Sin embargo, dijo que Bilbao "nos tiene acostumbrados últimamente a actuar con una deslealtad que parte de un problema que tiene el PNV, que todavía no ha aceptado que hace un año los representantes legítimos de los vascos eligieron lehendakari a Patxi López".

URDULIZ

El dirigente del PSE señaló que el "último embuste soberano" del PNV es el caso de soterramiento del metro en Urduliz". Pastor explicó que el Gobierno vasco ofreció a la Diputación que, al igual que se hace con las Líneas 1 y 2 del Metro, participara también en la gestión y explotación de la Línea, ahora explotada por EuskoTren, para, "con el margen presupuestario", el Gobierno vasco emprender el soterramiento de Urduliz con un proyecto "razonable", a lo que Diputación se negó.

Pastor apuntó que, como la obra del soterramiento de Urduliz, proyecto presentado "unilateralmente" por el PNV en el orden del día del Consejo del Consorcio de Transportes, superaba los 40 millones de euros, "tanto como el hospital de Urduliz al que da servicio, entre otras cosas", el Gobierno vasco "prioriza los gastos y decide que es más eficiente acometer la eliminación del paso a nivel para garantizar los accesos al centro sanitario". "Así queda aparcado un proyecto que el diputado general de Bizkaia no incluyó entre los proyectos estratégicos que en su día enunció como imprescindibles para Bizkaia", subrayó.

Tras destacar que el Gobierno vasco "invierte más que nunca en Bizkaia y mucho más de lo que hacía el Gobierno de Ibarretxe", hasta un 70 por ciento del presupuesto disponible del Departamento de Transportes, el responsable de los socialistas vizcaínos repasó todos los proyectos previsto para Bizkaia

Pastor acusó a Bilbao de ocultar el compromiso del Gobierno vasco con el metro de Rekalde, la elaboración del estudio informativo sobre el metro a Galdakano, la ampliación del suburbano hasta Basauri y Kabiezes, la Línea 3, el tranvía en Barakaldo y las cocheras del tranvía en Leioa, entre otros.

Asimismo, acusó al diputado general de "ocultar y tergiversar hasta la indecencia" el proyecto ferroviario de conexión con Castro, porque "lo que se elabora es un estudio para ver las opciones y, en caso de que se avalase la viabilidad del proyecto y la opción fuera a través de Feve o Renfe, su coste correría a cargo del Ministerio de Fomento".

A su juicio, "todo esto no son más que cortinas de humo de la Diputación para ocultar la nefasta gestión del gerente del Consorcio de Transportes". En ese sentido, criticó la ausencia de declaraciones por parte de la Diputación en relación a "los 56 millones de euros aparecidos como por arte de ensalmo en las arcas del CTB", cuando "tuvieron la desfachatez inmensa de querer aumentar la deuda pública del Gobierno vasco por encima de los límites legales, sólo para poner en un aprieto mayor al lehendakari".