Bilbao

El portavoz del PSE-EE en el Parlamento vasco, José Antonio Pastor, ha afirmado hoy que se debe ser "mucho más exigente" con la izquierda abertzale "para no darles oxígeno" porque el final del terrorismo de ETA está "cerca".

En una entrevista en Radio Euskadi, Pastor ha opinado que el final del terrorismo está "más cercano que nunca" por la "absoluta debilidad" de ETA y que se podría producir en "un plazo que parecería impensable hace unos años".

El portavoz de los socialistas vascos ha recalcado que la izquierda abertzale debe "elegir entre bombas y urnas, no hay caminos intermedios ni atajos".

En cuanto a la presencia de las víctimas del terrorismo en las escuelas vascas, ha dicho que la Dirección de Víctimas del Gobierno Vasco está seleccionando a doce de ellas en función de requisitos pedagógicos, su habilidad para la comunicación y la capacidad para no transmitir rencor.

"Si algo han demostrado las víctimas del terrorismo es una lección de generosidad, de respetar el Estado de derecho y de no buscar el ojo por ojo. No se trata de adoctrinar políticamente, sino de transmitir valores de respeto, pero también de memoria, porque han pasado muchas cosas", ha añadido.

Por otra parte, Pastor ha considerado que "no es nada nuevo" que el PP oscile entre la postura de la Diputación de Vizcaya y la del Gobierno Vasco en cuanto a la propuesta de un nuevo Guggenheim en Urdaibai, pero ha subrayado que un proyecto "de ese calado" sólo puede ser aprobado por el patronato de la Fundación Guggenheim si es apoyado por las dos instituciones socias.

"Otra cosa -ha añadido- es si la Diputación quiera gastar el dinero en bobadas y encarga un estudio arquitectónico", ha señalado después de reprochar al PNV que monte un "escándalo" por que el Gobierno Vasco gaste 300.000 euros en un estudio sobre la conexión ferroviaria de Vizcaya con Castro Urdiales y ahora la Diputación pueda "tirar un millón de euros a la basura" con un concurso de ideas para el Guggenheim de Urdaibai.

Para el portavoz socialista, plantearse en plena crisis económica un proyecto de "más de 200 millones" como el Guggenheim de Urdaibai es una "burla a la ciudadanía".