Patxi López admite que el proceso puede tener "marcha atrás" porque la izquierda abertzale ha retrocedido en sus planteamientos
Dice que algunos quieren "cobrar" autodeterminación y territorialidad a cambio de la paz y advierte que PSE "no cederá ni un milímetro"
BILBAO
El Secretario General del PSE-EE, Patxi López, admitió hoy que el proceso de paz puede tener "marcha atrás" debido al "momento de dificultad" por el que atraviesa, al haber retrocedido la izquierda abertzale "en sus planteamientos". Además, afirmó que, si ese momento "delicado" se ha producido, es porque "algunos" quieren "cobrar" la autodeterminación y la territorialidad a cambio de la paz y advirtió de que su partido "no cederá ni un milímetro" en esa cuestión.
En un debate celebrado en la Cadena SER, recogido por Europa Press, López aseguró "estar preparado" para que eso ocurra ya que "el Estado de Derecho no ha bajado la guardia ni un solo momento en la colaboración con Francia y en la determinación policial de perseguir y detener a los terroristas", dijo.
Reprochó que hace dos años, la izquierda abertzale en la declaración de Anoeta, manifestara su intención de sacar "el conflicto de la violencia" de las calles y se comprometiera a utilizar sólo "herramientas de la política", mientras ahora "la kale borroka se practica todos los fines de semana y quieren, parece, imponernos sus pretensiones de territorialidad y autodeterminación".
"Por lo tanto -advirtió-, hay una marcha atrás que nosotros no estamos dispuestos a asumir porque mantenemos firmes los principios de ausencia de violencia y democracia y Estado de Derecho para avanzar".
"SIN COMPROMISOS"
Criticó que el PP hable "continuamente" de "traición" del PSOE y del Gobierno y advirtió de que, si los "compromisos" ya se hubieran adquirido, como afirma Rajoy, "estaría todo arreglado". "Es una falacia, una mentira absoluta, porque, si no, no estaríamos hablando de problemas y dificultades", enfatizó.
El dirigente socialista se dirigió a la presidenta del PP vasco, María San Gil, presente en el debate, para advertirle de que no admitirá que se erija en "la campeona del mundo del enfrentamiento a los terroristas y de la defensa del restado de Derecho".
"Todos queremos la paz sin precio político, y el proceso, si está en un momento delicado, será porque no asumimos lo que algunos quieren cobrar por la paz: ni autodeterminación, ni territorialidad, ni nada. Mantenemos firmes los principios de un Estado de Derecho, tan firmes como nuestra voluntad de conseguir la paz", dijo.
Afirmó que, efectivamente, el proceso se encuentra en una situación delicada y que los socialistas no cederán "ni un milímetro" en "ese camino". "La paz no tiene precio político, no va a venir nunca como consecuencia de la autodeterminación por la territorialidad. Esa es la paz que queremos la inmensa mayoría de la buena gente de este país y es por la que estamos peleando, por cierto, sin vuestro apoyo", señaló.
Lamentó que, "desde el momento uno" del alto el fuego, no haya habido "ni una sola palabra de ningún dirigente del PP que dé aliento a la esperanza de la sociedad español, que entienda que este momento, de tener sentido de Estado, porque lo único que habéis tenido es estrategia electoral".
No obstante, se mostró "optimista, por fuerza" respecto al futuro, porque "hay una inmesa mayoría que quiere que termine el problema de la violencia y definamos un futuro entre todos. "Creo que estamos todos en este barco, remando el la misma dirección, incluido la inmensa mayoría del PP", dijo.
PP
López se mostró preocupado por las declaraciones de los líderes del PP, de "extender la sospecha" sobre un Gobierno "democrático" que "no sólo tiene la legitimidad, sino la obligación, de que cuando haya una posibilidad de conseguir la paz, intentarlo aunque salga mal, como hizo el Gobierno de Aznar".
Aseguró que el ex presidente del Gobierno 'popular' fue a "negociar con ETA" sobre las bases del Pacto de Lizarra "de marginación y exclusión de los no nacionalistas", envió a "un secretario de Estado que fue a decir que no iba a haber ni vencedores ni vencidos, y que el Gobierno de la nación iba a ser generoso". "Incluso Miguel Sanz decía que Navarra iba a estar ahí", agregó.
Reclamó la unidad de los demócratas y rechazó que el PSOE fuera, tal como afirma el PP, "quien hizo agua de borrajas" el Pacto Antiterrorista, cuando los populares utilizan "un día sí y otro también, en exclusiva, la voluntad de conseguir la paz, y la política frente a la violencia para atacar y desgastar al Gobienro socialista".
"Eso es una deslealtad absoluta, porque, cuando el Gobierno de Aznar dirigía la política terrorista contó con todo el apoyo del PSOE y la única diferencia entre el funcionamiento de aquel pacto y del de hoy es que el PP no apoya a quien tiene que gestionar y dirigir la política terrorista", acusó.
Por otra parte, aclaró al PP que, si él se reunió con quien "bajo la denominación de la izquierda abertzale representa a una parte de la sociedad vasca", lo hizo con el "beneplácito del juez Garzón, que no vio ni antes ni después nada punible".
"Y tú, por eso, me has llevado a los Tribunales y me quieres inhabilitar en política y creo que estáis pasando, con todas estas actuaciones, todas las líneas rojas de la decencia política", censuró a la presidenta del PP.
"MEZCLA INTENCIONADA"
Para el dirigente socialista, el PP mezcla "intencionadamente" el posible diálogo del Gobierno con ETA para "el abandono de las armas" con el "necesario diálogo político" que debe producirse en euskadi entre los partidos políticos. "Y para eso, está haciendo más propaganda, dando más capacidad de iniciativa y más protagonismo a Arnaldo Otegi o a la propia ETA que a los partidos democráticos", dijo.
Aseguró que, pese haber solicitado a la presidenta del PP mantener una reunión ésta se negó, algo "demostrativo de la actitud del PP", y le preguntó por qué su formación "atribuye a ETA la capacidad de generar en Euskadi un espacio para el diálogo político hecho por primera vez en ausencia de violencia, que represente al conjunto de la sociedad vasca, que sea dentro del marco legal y busque el consenso y el denominador común para definir la convivencia en Euskadi, para hacer una Euskadi entre todos".
"¿Desde cuándo el diálogo político hecho en libertad, en igualdad de condiciones, en ausenia de violencia, es el triunfo de ETA y el de los demócratas?", preguntó, tras advertir de que todavía "no hay mesa" de partidos.
Además, censuró que el anterior Gobierno del PP, "con mil actos de violencia callejera", se reuniera, "no sólo con ETA, sino con HB, con toda la Mesa Nacional en la cárcel". "Tenemos el triste récord de casas del pueblo quemadas en ese periodo", dijo.
Aseguró que el PSE habla con el resto de formaciones "para definir ese espacio de diálogo, para que todos puedan aportar su visión de cómo solucionar el problema y cómo definir la convivencia en ese país". Los condicionantes, según enumeró, deberán ser la "ausencia total de cualquier expresión de violencia del terrorismo, recorrido dentro del Estado de Derecho y la legalidad y la búsqueda del consenso".
Para López, además, no se deben crear "fetiches" y sí admitir que que los encuentros se mantengan fuera de la sede parlamentaria. "Quiero un espacio para el diálogo y un tiempo sin límites y sin votaciones que obligue a llegar al consenso, al pacto con diferentes, y eso no lo mezclo con la búsqueda de la paz o el diálogo que tenga que tener el Gobierno con ETA", dijo.