Patxi López afirma que 2007 ha sido el año "del Ibarretxe ausente" y critica que sólo aparezca "para publicitar su consulta"
Dice que el PSE-EE es "el único partido que asegura que no habrá ninguna rebaja en la capacidad del autogobierno vasco"
BILBAO
El Secretario General de los Socialistas Vascos, Patxi López, aseguró hoy que 2007 ha sido "el año del Ibarretxe ausente" y criticó que el lehendakari "sólo aparece en este país para publicitar su consulta y para hacer guiños al mundo del abertzalismo radical del que quiere conseguir votos".
En una rueda de prensa celebrada en Bilbao para hacer un balance político de 2007, el líder del PSE-EE www.patxilopez.com criticó que Ibarretxe aprovecha cualquier acto "para contarnos que, por encima de todo, él va a preguntar a los vascos y a las vascas" y se preguntó, sin embargo, "dónde está cuando se trata de dar respuesta a lo que necesitan los ciudadanos de este país".
"¿Es lógico que el lehendakari, después de los dos últimos asesinatos no haya dicho ni una sóla palabra? ¿Es lógico que tras los sabotajes, ataques y las amenazas que han sufrido los empresarios que construyen el TAV, que él también apoya, no haya dicho ni una sóla palabra? ¿Es normal que ante el deterioro de Osakidetza, ante la necesidad de mejorar nuestra educación, ante el problema de los jóvenes para acceder a una vivienda o ante la falta de diálógo social en Euskadi el lehendakari no aparezca y no sea capaz de liderar la soluciones que necesitan estos problemas?", se preguntó.
A su juicio, "no es lógico, no es normal y, además, pone de manifiesto una absoluta incapacidad de Ibarretxe para resolver problemas y un desapego absoluto por la Euskadi real que es la que tiene la obligación de liderar". "El lehendakari -añadió- ha demostrado que no sirve para liderar país, ni para dar respuestas a los ciudadanos".
López destacó que en 2007 el PSE-EE "ha confirmado su constante ascenso electoral" en las elecciones municipales y forales, lo que, a su juicio, "reafirma" su capacidad de ser "alternativa de Gobierno en Euskadi".
Tras asegurar que el PSE-EE es "el eje de la política en Euskadi y de los avances políticos y sociales que se están produciendo en este país" porque este es el año también "en el que se ha puesto en evidencia la crisis del tripartito y el fracaso de una fórmula que ha producido un Gobierno débil, ausente, sin liderazgo político para frontar los graves problemas que esta sociedad tiene planteados en temas como la vivienda, el empleo, la educación o la sanidad".
VICTIMAS DEL TERRORISMO
Por otro lado, López destacó el avance en 2007 en políticas comunes en defensa de las víctimas del terrorimo y destacó que, por primera vez en la historia del autogobierno vasco, el Parlamento ha celebrado un pleno monográfico sobre las víctimas "con un elevado grado de consenso, que los socialistas vascos han impulsado hasta el final".
En ese sentido, y, ante las críticas del PP a la política hacia las víctimas de los socialistas, López afirmó que "si existe la ponencia parlamentaria de víctimas y si hay avances y acuerdos importantes en las políticas sobre víctimas es también, aunque no sólo, por el trabajo y la capacidad de iniciativa de los socialistas vascos".
ELECCIONES GENERALES
En cuanto al nuevo año, López recordó la convocatoria de elecciones generales, "y no sé si de elecciones autonómicas anticipadas", y aseguró que los socialistas están preparados para ser en las dos "el primer partido de Euskadi".
El dirigente socialista afirmó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "representa la España que mira al futuro y Rajoy la España que mira al pasado".
En ese sentido, destacó el hecho de que el PP "haya impedido" en esta legislatura llegar a acuerdos para reformar la Constitución y hacer del Senado "una auténtica cámara de representación territorial que contribuya a cohesionar y perfeccionar el Estado de las autonomías, ahora resulta que lleva a su programa electoral una reforma de la Constitución con la que pretende rebajar los techos competenciales de las autonomías y volver a un centralismo rancio y a una España uniformada".
Tras anunciar que los socialistas vascos se opondrán "con contundencia" a este tipo de iniciativas porque "con el autogobierno de los vascos no se juega", López dijo que el PSE-EE es "el único partido que asegura que no habrá ninguna rebaja en nuestra capacidad de autogobierno", a la vez que garantiza que Euskadi "será un proyecto dentro de una España plural y dentro de una Europa unida que todos queremos".
"Nuestro proyecto es un proyecto de convivencia y de acuerdo entre diferentes para hacer país entre todos y para todos. Y ese es el reto que asumimos para el nuevo año: aunar fuerzas de dentro y de fuera del partido socialista para presentarnos ante la ciudadanía vasca como la alternativa que este país necesita, una alternativa progresista, autonomista y vasquista que nos permita ganar la paz y un futuro de crecimiento económico, bienestar, solidaridad, con más derechos y con mayor calidad de vida para todos", concluyó.
IRRESPONSABILIDAD
Aseguró que los socialistas acudirán a la ronda de contactos con los partidos anunciada por Urkullu, aunque consideró un "error que se siga dando cobertura a un mundo que es incapaz de hacer política sin la tutela de la violencia", en referencia a la izquierda abertzale.
IRRESPONSABILIDAD
Aseguró que los socialistas acudirán a la ronda de contactos con los partidos anunciada por Urkullu, aunque consideró un "error que se siga dando cobertura a un mundo que es incapaz de hacer política sin la tutela de la violencia", en referencia a la izquierda abertzale.
En su opinión, convocar a un partido "que ampara y justifica la violencia terrorista a una ronda de contactos con partidos democráticos es una irresponsabilidad que el PNV no debiera cometer", porque "no se puede mantener una actitud comprensiva con quien ampara la violencia sólo para buscar votos en ese mundo". No obstante, señaló que le alegraría que el encuentro fuera con EHAK y no con Batasuna.
El líder del PSE-EE afirmó que su partido ve "con preocupación los guiños que en los últimos días desde el nacionalismo democrático se están haciendo al mundo de Batasuna, tanto en la ronda de contactos que, al parecer, piensa llevar a cabo Iñigo Urkullu, como en los silencios clamorosos de Ibarretxe o en la presencia de Pernando Barrena en la clausura del congreso de EA".
El dirigente socialista señaló que es hora, "no sólo de condenar las acciones violentas de ETA, sino que es tiempo de estar todos los demócratas juntos, y no únicamente en las declaraciones, en contra de la propia existencia de la banda terrorista ETA y de quienes tratan de dar cobertura política y social al terrorismo".
"Es tiempo de deslegitimar con toda radicalidad los supuestos argumentos políticos con los que todavía pretende avalar sus atentados y el uso de la violencia, para que tengan absolutamente claro que quien mata a un hombre no defiende una doctrina, sólo mata a un hombre y que, por lo tanto, solo son asesinos", aseveró. En ese sentido, agregó que "no hay conflicto alguno que jsutifique la existencia de ETA, porque ETA es el conflicto".
López consideró una "tremenda equivocación que partidos democráticos, como PNV y EA, eleven a rango de interlocutor a un dirigente de una formación ilegalizada por amparar y justificar la violencia terrorista", en referencia a la presencia en el Congreso de EA del portavoz de Batasuna Pernando Barrena, quien "este fin de semana ha tenido una tribuna prestada para, sin condenar el atentado de Sestao, seguir mirando hacia otro lado y para disculpar la violencia, incluída la que ese mismo día tuvo lugar contra un cargo público de la propia EA presente en ese congreso".
En referencia al consejero de Justicia, Joseba Azkarraga, elegido secretario general de EA, dijo que "no se puede pedir por la mañana al mundo del abertzalismo radical que condene el ataque al Juzgado de Paz de sestao y recibir horas más tarde a uno de sus dirigentes como si no hubiera pasado nada, porque esto no es más que un ejercicio del cinismo más absoluto".
Por todo ello, insistió en que Iñigo Urkullu "se equivocará si se arrima al discurso de la equidistancia" porque ETA "no trata de impedir una consulta, lo que trata es de imponernos a todos su proyecto totalitario de país, el proyecto de un totalitarismo excluyente al que le sobra la mayoría de la sociedad vasca", por lo que los demócratas tienen que estar "todos juntos a la hora de decirle a esta banda fascista que nunca logrará sus pretensiones".