SAN SEBASTIAN

   El secretario general del PSE-EE, Patxi López, negó hoy "radical y rotundamente" que su formación mantenga una interlocución con Batasuna, al tiempo que consideró un "error y una irresponsabilidad" la decisión del lehendakari, Juan José Ibarretxe, de celebrar nuevas reuniones con la formación ilegalizada "como si no hubiera sucedido nada"

   En una comparecencia en San Sebastián tras un encuentro con alcaldes y junteros socialistas y con candidatos a las próximas elecciones municipales y forales, López dijo a Ibarretxe "no se puede actuar en este país como si no hubiera sucedido nada, porque el atentado de Barajas, además de provocar dos muertes, "ha frustrado el proceso de paz y ha roto con las condiciones básicas y mínimas de cualquier diálogo, la ausencia total de violencia".

   A su juicio, por ello, a la izquierda abertzale le tiene que quedar claro que, para poder hacer política, debe decir "hasta aquí hemos llegado a ETA", porque si no "será imposible la práctica de ese mundo de la política, la democracia y del diálogo".

   López afirmó que son los miembros de la izquierda abertzale "quienes tienen que dar los pasos, ya no con palabras si con hechos necesarios, para que entendamos que su apuesta por un proceso democrático y político es en serio".

   Por otro lado, se refirió a la causa abierta en el Tribunal Superior de Justicia por las reuniones con Batasuna, al criticar que el PP u "organizaciones afines" intenten "judicializar la política, llevando a los tribunales un asunto que debiera sustanciarse en el debate y la crítica política", para "utilizar al Poder Judicial como un apéndice más de su estrategia particular". 

   Además, subrayó que la causa contra él mismo y Rodolfo Ares por su reunión con Batasuna no se ha archivado, por lo que pidió al Gobierno vasco "que deje de utilizar eso del doble rasero de la Justicia cuando se refiere al Partido Socialista, porque no es más que un intento de engañar".

"MONTAR NUMEROS"

   López, que precisó que no han recibido ninguna citación a declarar, señaló que cuando su partido tiene una causa judicial abierta actúa "por la vía judicial y no montando otro tipo de números", por lo que criticó la manifestación y las muestras de apoyo ayer al lehendakari cuando acudió a declarar al Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.

   En su opinión, es "preocupante que, en lugar de responder seriamente y desde la responsabilidad que le corresponde a un gobierno", el Ejecutivo vasco "emprenda una campaña para justo lo contrario".

   En esta línea, añadió que, "no sólo juegan al victimismo al que nos tienen acostumbrados", sino que "ponen bajo sospecha, desprestigian y buscan la deslegitimación del conjunto del Poder Judicial".

   "La crítica es legítima, y yo la hago en este caso porque me parece una decisión de un tribunal en absoluto acertada, pero el ataque al sistema judicial como si fuera un elemento ajeno o enfrentado al sistema democrático o a las instituciones es irresponsable", agregó.

   Asimismo, respondió a la portavoz del Gobierno, Miren Azkarate, que él no acudió a la concentración celebrada en su momento por el PSOE frente a la cárcel Guadalajara en apoyo a José Barrionuevo, y que tampoco le parecía "acertada". Además, replicó que, tras conocer el encausamiento de López y Ares, el PSE-EE hizo un "acto de partido para mantener el reforzamiento" de sus dirigentes, y no "una movilización ciudadana contra los jueces" como el PNV.

   López también consideró "muy preocupante" el destrozo de los ramos de flores depositados en la tumba del edil del PP Gregorio Ordóñez y opinó que todo ello evidencia que las instituciones vascas deben realizar una "pedagogía democrática" para que la sociedad "asuma el valor" de lo que supone el Estado de Derecho.

   Finalmente, apostó por "volver a la senda de la cordura y la serenidad, al dialogo político e institucional, evitando la crispación y la división".