El Grupo Parlamentario Socialistas Vascos-Euskal Sozialistak considera que el Intergrupo que se aprobará mañana en el Parlamento vasco para la defensa de los derechos de personas migrantes y refugiadas sirve de contrapeso a los populismos xenófobos que se están expandiendo por Europa.

El portavoz de Derechos Humanos, Mikel Unzalu, se refiere así a la receptividad que ha tenido la propuesta socialista de crear un foro de trabajo permanente, para ésta y las siguientes legislaturas, que mañana recibirá mañana el visto bueno de la mesa con el refrendo de todas las formaciones. El Intergrupo analizará los flujos de personas migrantes y refugiadas que desde diferentes zonas en conflicto intentan acceder a la Unión Europea, hará una valoración y seguimiento continuo de la situación de estas personas, conocerá la situación de las personas que accedan a la Comunidad Autónoma de Euskadi, identificará su estado y sus necesidades con el fin de concretar los recursos que deban ofrecérseles, y procurará iniciativas del Parlamento Vasco que sirvan de apoyo a las personas refugiadas.

“La tragedia humanitaria derivada del conflicto en Siria no ha cesado y, sin embargo, vemos con preocupación que no sólo se levantan nuevos muros y se firman acuerdos que no garantizan los derechos de las personas que huyen, sino que además en algunos lugares de Europa se da amplio respaldo para gobernar a fuerzas que lucen como principal bandera la discriminación y la falta de humanidad”, recuerda.

Por eso Unzalu celebra que, en este escenario, en Euskadi no sólo haya una apuesta institucional compartida por atender a quienes escapan del horror, “sino que en el Parlamento asumamos que no estamos sólo ante una urgencia que debamos resolver hoy, sino ante movimientos migratorios importantes y por diversas causas que se mantendrán en el futuro”. “Dentro de tanta oscuridad, los socialistas celebramos que se haya aceptado nuestra propuesta de asumir un compromiso permanente en favor de los derechos humanos de quienes buscan nuevas oportunidades para una vida digna”, concluye.