El Partido Socialista de Euskadi ha alcanzado un acuerdo con el Gobierno "para corregir lagunas" de su proyecto presupuestario y facilitar que en el año que queda de esta legislatura "los ciudadanos dispongan de herramientas públicas para resolver sus problemas".

En unas cuentas que "no son las que los Socialistas hubiesemos deseado", el PSE-EE entiende que se incluyen todas las políticas introducidas en 2013 sobre planes de empleo, impulso de la economía, investigación, infraestructuras y reforzamiento de los servicios públicos, a lo que se suma la extensión de derechos sociales aprobados por el Parlamento a propuesta socialista, como los contemplados en la Ley de Vivienda, todo ello con una estimación económica de 1.700 millones de euros que aún está abierta a mejoras en forma de enmiendas que se registrarán en los próximos días.

En una comparecencia ante los medios de comunicación, el portavoz del Grupo Socialista, José Antonio Pastor, y la portavoz presupuestaria, Susana Corcuera, han explicado que habrían sido preferibles presupuestos "más ambiciosos, con apuestas estratégicas, como las impulsadas en plena crisis por el Gobierno de Patxi López", pero que, tras conseguir varias rectificaciones por parte del Ejecutivo de Urkullu, empezando por la reforma fiscal, el proyecto contiene “mimbres” por los que se atienden problemas reales de los ciudadanos. “Los socialistas seguimos empeñados en la política pura, sin distracciones", ha señalado Pastor.

El portavoz socialista ha reiterado que "hemos dado un giro a la agenda política, la política que sirve para solucionar problemas de los ciudadanos, no para crear otros nuevos, la política que atiende las urgencias, las preocupaciones diarias, y que piensa en las reformas necesarias para seguir garantizando el bienestar en el futuro"

"Donde otros buscan fracturas, los socialistas ofrecemos suturas. Cosemos una Euskadi donde se han abierto grietas sociales: desempleo, precariedad, desigualdad", ha afirmado Pastor que lamenta que el Gobierno "se haya quedado atrás". "Nosotros tenemos propuestas de transformación de este país para los retos que habrá que abordar en el futuro. Sabemos que los vascos necesitan otra cosa. Necesitan un Gobierno ágil, con propuestas para atender lo urgente y preparar el futuro. Hemos conseguido que los últimos Presupuestos de Urkullu permitan a los ciudadanos sostener sus derechos a la espera de un Gobierno mejor”, ha señalado Pastor.

Susana Corcuera, por su parte, ha detallado en qué han consistido las conversaciones con el Gobierno, desde que la Secretaria General del PSE-EE, Idoia Mendia, advirtiera primero en el Pleno de Política General de que no admitiría ni un solo recorte, y después, tras las informaciones confusas de distintos miembros del Ejecutivo, exigiera aclaraciones al propio lehendakari. Tras constatar que el proyecto incluía los compromisos adquiridos desde 2013, con un impacto económico de 1.700 millones de euros, Corcuera ha añadido la preocupación socialista por varias dudas referidas sobre todo a que se desarrollaran la ley de Vivienda y la antifracking. Eliminada cualquier sospecha de incumplimiento, se ha procedido a llegar a un acuerdo que aún se perfeccionará con enmiendas dirigidas a fortalecer políticas de atención a personas en riesgo de exclusión, formación en todos los niveles educativos y también a  los desempleados, reforzar el tejido asociativo, social y cultural, así como para cubrir otras lagunas detectadas.