VITORIA - GASTEIZ

   El portavoz de la Ejecutiva del PSE-EE, Rodolfo Ares, ha afirmado hoy que las "posiciones equidistantes" del consejero de Justicia, Joseba Azkarraga, en torno al combate del terrorismo están "contaminando y devaluando" las medidas concretas del Plan de Educación para la Paz y los Derechos Humanos.

   Ares ha comparecido hoy ante los medios, junto con otros tres parlamentarios de su grupo, para dar a conocer que su grupo ha solicitado un nuevo plazo de quince días para hacer nuevas aportaciones a dicho Plan, cuyo borrador "definitivo" fue presentado por el director de Derechos Humanos del Gobierno, Jon Landa, el 28 de noviembre pasado.

   Los socialistas han reconocido que en este último documento se han producido avances respecto de anteriores, básicamente porque se contempla como objetivo principal la deslegitimación del terrorismo, aunque han advertido de que todavía persisten "ambigüedades, incoherencias y cosas que no pueden ser asumibles".

   Ha explicado que se deben eliminar esos términos del documento y de las manifestaciones públicas de miembros del Gobierno Vasco, como el consejero Azkarraga, quien en la lectura de una declaración institucional ayer arremetió contra ETA por negar el derecho a la vida de sus conciudadanos, pero también contra los "injustos y desproporcionados" encarcelamientos de los detenidos por el sumario 18/98.

   "No podemos aceptar que a estas alturas el consejero de Justicia equipare el terrorismo de ETA con la acción del Estado de derecho, porque eso no es educar en valores democráticos, sino mercadear con esta cuestión para intentar obtener un puñado de votos", ha añadido.

   Ha explicado que su grupo no asume que en el Plan, que tendrá que ser aprobado definitivamente por el Consejo de Gobierno, denomine en algunos párrafos a la actividad de ETA "violencia de motivación política", porque "no nos vamos a prestar a dar legitimidad política al terrorismo de ETA".

   Tampoco aceptan por "incoherente" que el mismo Gobierno que propone este Plan conceda subvenciones a organizaciones que no condenan la violencia.

   Ares ha recalcado que en el documento no se tiene suficientemente en cuenta a las víctimas del terrorismo ni se explicita que la deslegitimación del terrorismo debe ser "ética, social y política", porque "no sabemos si el Gobierno Vasco está por esa triple defensa de los principios democráticos".

   Esta defensa, a juicio del PSE-EE, se debe plasmar también en los medios de comunicación públicos, porque en ocasiones están siendo utilizados por ciertas personas y colectivos como altavoces del entorno de ETA, cuando deberían ser "beligerantes" contra el terrorismo.

   Ares ha denunciado que en tertulias de la televisión pública vasca se "da voz a gente del radicalismo abertzale que defiende posiciones de fuerzas políticas ilegalizadas, que no sólo se niegan a condenar el terrorismo, sino que, además, son capaces de decir, por ejemplo, que es el Gobierno el responsable del último atentado terrorista, por mandar a la Guardia Civil 'a la boca del lobo'".

   El portavoz de la Ejecutiva de los socialistas vascos ha insistido en que su grupo no quiere utilizar este Plan como un elemento de "combate" al Gobierno Vasco, sino que lo que pretende es que se apruebe un buen documento con medidas concretas, ya que de su resultado "dependerá en buena medida el futuro de nuestra convivencia en paz y libertad".