Zapatero dice que Ley de Partidos se aplicó en su justo término y afirma su disposición a dialogar sin violencia
Recomienda la "lección" del Ulster a quienes secundan el terror, llama "cobarde" a Batasuna y deplora la actitud del PP, al que exige "apoyo".
Reconoce que la política antiterrorista "ha sido siempre muy difícil para cualquier Gobierno" y que "lo será" en un futuro.
VITORIA - GASTEIZ
El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró hoy en Vitoria que la Ley de Partidos Políticos ha sido aplicada "en su justo término, no menos de lo que exige ni más de lo que establece".
En la primera vez en que el jefe del Ejecutivo se pronuncia después de que el Tribunal Constitucional confirmase la sentencia del Supremo que 'tumbó' las listas de ANV y AS impugnadas por Fiscalía y Abogacía del Estado, Zapatero, que citó el reciente acuerdo del Gobierno del Ulster, exigió al PP apoyo, recalcó que sólo hay "proceso" con la "palabra", que "violencia y política son incompatibles" y que, si se pone fin a la primera, "el PSOE está dispuesto a dialogar".
El presidente, que en lo que va de campaña no se ha referido en ningún momento a la lucha antiterrorista, aseguró que había esperado a "hablar de la situación en Euskadi" en este acto por "respeto" a los aspirantes y a su tarea. "Sois valientes de buena fe", les señaló.
"FIRME" VOLUNTAD DE VER FIN DE VIOLENCIA
Así, ante unos 350 candidatos socialistas vascos en el Palacio de Festivales de Vitoria, Zapatero deseó "los mejores resultados posibles los aspirantes de todos los partidos democráticos que concurren" a las elecciones del 27 de mayo y que puedan "desarrollar y ejercer libremente sus ideas".
***Foto2***El secretario general del PSOE comentó entonces que se dice "que habla poco de la política antiterrorista". "Pero siempre he creído que la coherencia en política es fundamental. Siempre he hablado lo justo de terrorismo y política antiterrorista y cuando era líder de la oposición, hablaba poco y lo que hablaba, era para apoyar al Gobierno de España", aseguró.
En ese punto, en la primera crítica de su intervención contra el PP, lamentó "profundamente" que ahora "quien esté en la oposición hable mucho y no apoye nada". Así, recordó a los 'populares' que es el Gobierno quien, por mandato constitucional, dirige, "los designios de la nación y la política antiterrorista". Con estas bases, afirmó que no le "impresionan ni le afectan" ni "los insultos ni las descalificaciones". "Sigo con mi firme y decidida voluntad de combatir, prevenir y trabajar por ver el fin de la violencia en Euskadi", remachó.
"COBARDÍA" DE BATASUNA
Zapatero dio entonces por hecho que Batasuna no estará presentes en las elecciones. Así, se dirigió a la formación ilegalizada y apuntó: "Aquellos que en estos días protestan, atacan nuestras sedes, ejercen actos de coacción porque se les ha aplicado la Ley de Partidos y no pueden comparecer en las urnas, les reitero que nada es posible en democracia con violencia, ni con respaldo, justificación y explicación a la violencia", indicó.
"Violencia y política son incompatibles y violencia y democracia son incompatibles", prosiguió Zapatero, que destacó que "quien no es capaz de defender sus ideas sólo con la palabra, es que no tiene fe en sus ideas y tiene muy poca valentía, por no decir mucha cobardía".
Sin citar en ningún momento a ANV, el jefe del Ejecutivo hizo entonces una alusión a lo acontecido los últimos días respecto a esta formación. "Nuestra trayectoria en defensa de la libertad, de la democracia, en defensa de una Euskadi con un gran acuerdo de convivencia es un camino recto, como la defensa del Estado de Derecho, como hemos aplicado la Ley de Partidos --enfatizó--. La hemos aplicado en sus justos términos, no menos de lo que exige ni más de lo que establece. Así es como se aplican las leyes, por el camino recto".
"Resulta paradójico por no decir irritante ver como ante los mismos que protestan porque no van en las listas porque no han hecho los deberes y condenado la violencia y hecho deberes, la oposición democrática diga que hemos abierto la puerta a los violentos", recalcó entonces. "Sabemos tener paciencia, os pido la misma", apuntó.
El jefe del Ejecutivo reconoció que la política antiterrorista "ha sido muy difícil para cualquier Gobierno" y que "lo será" y que exige "ante todo unidad, altura de mira, generosidad y voluntad de apoyo a quien tiene la responsabilidad de llevarla adelante". Fue en ese punto, ante los "valientes de buena fe", en el que exigió al PP "que vuelva a la unidad, a la lealtad y que apoye al Gobierno de España en la lucha antiterrorista y para trabajar por el fin de la violencia".
También por primera vez, Zapatero hizo alusión públicamente al reciente acuerdo de gobierno en el Ulster. "Hemos visto cómo en Irlanda se culminaba un proceso de paz tras muchos años, como se salía de una gran pesadilla histórica" y cómo los "antagónicos" han sido capaces de sentarse juntos.
Tras felicitar a quienes han hecho posible el acuerdo, se refirió de manera singular al primer ministro, Tony Blair.
"Sé que hay muchas diferencias entre Irlanda y Euskadi", apuntó el presidente, que citó dos: que el Ejecutivo británico "tuvo el permanente apoyo de la oposición de los conservadores para el proceso de paz" y que "no hay proceso si la violencia no se deja atrás y se abandona".
"Esa es la lección de Irlanda y la que tienen que tener aquí los que aún secundan la violencia --remachó--. Con pistolas y bombas no hay proceso de paz. Solo hay con la palabra, el diálogo y dejando atrás la violencia, que es absolutamente intolerable en una sociedad democrática".
Dicho esto, Zapatero recordó su último mitin en esta ciudad, el pasado mes de febrero, cuando enfatizó que mantenía sus "principios" en torno a lo que ha de ser una política que lleve al fin de la violencia y que se basa "en cuatro ideas muy sencillas".
La primera, que "todo bajo el imperio de la Ley y el Estado de Derecho"; la segunda, "diálogo cuando se abandone la violencia"; la tercera, "un gran acuerdo de convivencia en Euskadi". "Y el PSOE está dispuesto a dialogar siempre que se ponga fin a la violencia", agregó en ese punto. Y la cuarta, "toda su determinación" por trabajar "aún con insultos, descalificaciones y mentiras" por su "deber" como presidente, que es el de "que se acabe la violencia y llegue la paz a Euskadi".
EL ESTÍMULO DE CANDIDATOS Y SIN USAR VÍCTIMAS
Zapatero se deshizo en elogios con el PSE y se felicitó de las 198 candidaturas presentadas, las más numerosas de toda la historia, con 63 mujeres de cabeza de lista. Agradeció a los aspirantes el que hayan aceptado ir en las mismas y tener "la serenidad ante las amenazas y el aguante ante los insultos". "Gracias porque para mí constituís un estímulo imparable y principal", les expresó, asegurando que con su tarea.
Señaló que las grandes conquistas democráticas, como el hacer que la Ley y las reglas del juego democrático se cumplan y que la violencia "tenga fin", exigen "paciencia, serenidad y sosiego". "Tenemos la gran autoridad moral de haber siempre trabajado por el camino recto, apoyando a quienes les tocaba combatir a la violencia, asumiendo la dureza de perder compañeros y llorando con quienes perdían militantes".
El secretario general de los socialistas se apoyó en estas afirmaciones para asegurar que los socialistas recuerdan, "lloran" y "reconocen" a todas las víctimas. "Están en nuestra memoria, pero nunca las utilizaremos. Ni lo hemos hecho ni lo haremos", remachó.
Por último, auguró al secretario general del PSE, Patxi López, que el partido tendrá un gran éxito en las elecciones del 27 de mayo. "Sé que haréis campaña con la dignidad que os caracteriza, para poner paz entre todos y discernir lo que es una pura estrategia partidista. Nada os puedo pedir --finalizó--. Dais todo por la paz, la convivencia y la libertad. A mí me lo podéis pedir todo también. Estoy dispuesto a dar todo por la libertad y la paz".