Socialistas Vascos

Propuestas Políticas

3- Democracia, Libertad, Convivencia

3.1- La Democracia

3.1.4- La propuesta de los Socialistas Vascos

Los Socialistas Vascos vamos a fomentar y difundir los valores de la democracia, defenderlos, mejorarlos, y modernizarlos, acercar la ciudadanía a la política de forma efectiva a través de todos los mecanismos de divulgación a nuestro alcance.

Vamos a denunciar la simplificación dañina de que la democracia, porque no compartimos maximalismos elevados a ley, que afirman que la democracia es simplemente una votación abierta de todos, anárquica, en la que todo lo colectivo se decide por la voluntad mayoritaria. La democracia se fundamenta en la soberanía representativa y en un cúmulo de minorías cambiantes que forman mayorías decisorias.

Los Socialistas Vascos, junto a la voluntad de la mayoría, defendemos también los derechos de las minorías y la obligación de respetar los procedimientos que son la garantía para impedir que grupos de poder o de interés puedan marginar las opiniones de la ciudadanía, especialmente de los que tienen menos recursos, rompiendo con el principio de la igualdad y permitiendo una clasificación de ciudadanos de primera y de segunda.

Los Socialistas Vascos vamos a fomentar tres aspectos que mejoran el funcionamiento de la democracia y permiten a la ciudadanía un mayor protagonismo: la transparencia, el control y la participación.

La transparencia

Nunca antes en la historia ha habido tantos recursos para que la acción pública sea transparente. Las nuevas tecnológicas nos permiten hacer un seguimiento en línea de la acción de gobierno. No hay razón para que el poder oculte su actividad al ciudadano.

Junto a los mecanismos clásicos de publicidad y dación de cuentas, hoy está la red. Una enorme plaza pública abierta en la que el ciudadano puede pasear comprobando la acción de gobierno.

Los Socialistas Vascos vamos a impulsar, como lo hemos hecho de forma ejemplar en nuestro Gobierno, una mayor transparencia en todos los ámbitos de la “cosa pública”.

Poniendo a disposición de la ciudadanía, directamente, la enorme cantidad de datos que posee la Administración Pública, para que puedan ser reutilizados por la ciudadanía, evitando cualquier traba que pueda afectar a esa transparencia.

Creando nuevas herramientas que permitan construir una Administración de cristal para que el ciudadano haga un seguimiento de las decisiones políticas.

La ciudadanía demanda esa misma transparencia a las personas que ejercen cargos públicos, a los partidos políticos y cargos orgánicos. Algunos problemas específicos como la corrupción requieren una atención especial. Porque afectan a los valores básicos de la democracia, tanto en las prácticas de los partidos políticos como en la propia Administración Pública, además provoca el alejamiento de los ciudadanos de la política.

En aquellos casos en los que haya apropiación de recursos económicos o patrimoniales, la corrupción deberá ser castigada según la máxima severidad que establezca la ley, máxime en casos como estos en los que quienes han de velar por lo público son quienes primeros lo conculcan, exigiendo la devolución del beneficio obtenido.

Debemos proponer cambios en el código penal, para que las penas por delitos de corrupción sean endurecidas.

Otra de las prácticas que deberían ser perseguidas y castigadas es el uso partidista o mediático de los presuntos casos de corrupción. En demasiadas ocasiones se olvida el principio fundamental de la presunción de inocencia para sacar réditos políticos o simplemente para deteriorar la imagen de lo público. Los juicios paralelos no benefician ni a los presuntos delincuentes, ni al sistema democrático. Pero esconder y tergiversar actitudes de corrupción de aquellos cargos que los perpetren no conduce sino al descrédito general de las instituciones públicas. Es necesario aplicar la estrategia de clarificación y transparencia absoluta sobre tales hechos.

Por ello proponemos:

  • Reforzar en las normas internas del Partido y en los textos legales los mecanismos para que exista certeza de sanciones tanto desde la organización política que representan las personas que han abusado de su cargo público para sus propios intereses, como desde los tribunales de justicia.
  • Denunciar, poner a disposición de la justicia y agilizar las investigaciones en los casos de corrupción, aumentando los medios para resolverlos y evitar incertidumbres, juicios paralelos y la percepción negativa del sistema democrático por parte de la ciudadanía, evitando todo tipo de corporativismo y aplicando medidas contra todos aquellos que desde el partido hayan realizado cualquier acto que tuviera que ver con prevaricación, malversación o cualquier otro tipo de corrupción, con un compromiso ético de no contravenir una sentencia judicial a través de indultos.

El control ciudadano de la acción política

Muchos elementos clásicos, como la separación de poderes, los procedimientos obligatorios, tienen como objetivo el control de los poderes públicos y evitar la arbitrariedad en las decisiones.

En la actualidad existen los medios técnicos para que la ciudadanía pueda hacer una labor de vigía ante los poderes públicos. El ciudadano puede asumir la responsabilidad de velar para que no haya distorsiones o arbitrariedades en la acción pública. Sin embargo, existe la opinión generalizada de que la política y las Instituciones son poco permeables y cercanas a los ciudadanos.

Y para cambiar esta opinión y facilitar que la ciudadanía pueda hacer esta labor debemos construir una Administración transparente y comprensible

Los Socialistas Vascos vamos a proponer modificaciones legales que doten de un lenguaje más sencillo y comprensible para la ciudadanía toda la producción administrativa. Así como a mejorar los mecanismos para que las reclamaciones ciudadanas tengan una respuesta rápida y personalizada.

Los Socialistas Vascos vamos a proponer modificaciones legales que doten de, un lenguaje más sencillo y comprensible para la ciudadanía de toda la producción administrativa. Así como a mejorar los mecanismos para que las reclamaciones ciudadanas tengan una respuesta rápida y personalizada.

Y, finalmente, los Socialistas Vascos vamos a potenciar nuevos instrumentos de intervención para que la ciudadanía tenga acceso directo a la información pública proponiendo una Ley de transparencia que sea realmente herramienta ciudadana para el control de la acción pública.

La participación

La participación ciudadana limitada al momento de las elecciones es una enorme fuente de insatisfacción en nuestra democracia, que hay que combatir. Por ello, los socialistas debemos promover una reforma general de los instrumentos de participación no electoral, que incluya medidas que faciliten la generalización de iniciativas ciudadanas de impulso y control, porque a mayor participación ciudadana, mayor calidad democrática tendrá nuestro país. Para ello es necesario impulsar la modificación de la actual regulación de la iniciativa legislativa popular, para convertirla en un mecanismo eficaz de participación de la ciudadanía, facilitando su tramitación, y seguir apostando por los Presupuestos participativos en todas las instituciones.

La participación de la ciudadanía en la gestión de la “res pública” no tiene que suponer la anulación y deslegitimación de la representación institucional de esa misma ciudadanía. Abrir la puerta a la participación mejora la calidad del sistema democrático. Abrir cauces a la participación mejora el funcionamiento y a añade legitimidad al sistema. Y en la propia ciudadanía estimula dos componentes políticos:

a) La inteligencia colectiva.

El dar opciones a las personas, asociaciones e instituciones en el proceso de análisis y de decisión añade inteligencia colectiva. Esta participación aporta a la Administración y sus responsables la experiencia y conocimiento que la propia administración no posee. Por ello la toma de decisión es siempre más sólida después de haber asumido o escuchado la experiencia y las propuestas externas a la administración.

b) La corresponsabilidad ciudadana.

Cuando las personas tienen la opción de hablar, de poder ofrecer sus propuestas al debate común para tomarse en consideración, se acerca a la política y a la ciudadanía, se aumenta considerablemente la corresponsabilidad social y la legitimidad de la democracia, único sistema político que permite esa participación.

Volver al índice